Con la llegada de la cuesta de enero, has caído en la cuenta de que estaría bien recortar gastos. Y ya de paso, cuidar un poco más el planeta. Un buen aislamiento térmico consigue las dos cosas al mismo tiempo. Y no es tan caro como parece.

 

¿Qué es el aislamiento térmico?

El conjunto de medidas tomadas para reducir las fugas de temperatura en una vivienda se consideran aislamiento térmico. Incluye, desde el aislamiento de fachadas o muros, hasta la instalación de ventanas, puertas y otros cerramientos.

Un buen aislamiento térmico es la forma más sencilla y eficiente de reducir el consumo energético, tanto en invierno como en verano.

 

¿Qué tipos de aislamientos térmicos existen?

Las soluciones para el aislamiento térmico de paredes y techos ha evolucionado mucho en los últimos tiempos.

Si hace unos años prácticamente solo se conocían los aislantes minerales, como la lana de roca o la lana de vidrio, ya no son la única opción.

Las placas de poliestireno expandido y la espuma de poliuretano son muy ligeras y fáciles de aplicar, incluso en espacios reducidos o en cubiertas que no soportarían un peso elevado.

Los aislantes de origen natural, por su parte, están ganando peso gracias a las bioconstrucciones y a una mayor conciencia ecológica. Materiales como madera, paja o corcho suponen una gran opción para obras nuevas, aunque es algo más difícil de aplicar en viviendas ya existentes.

 

¿Por qué debo aislar mi casa?

Por dos motivos fundamentales: Al evitar fugas de calor ahorras en calefacción. Esto siempre es interesante. Pero es que, además, al aislar correctamente tu vivienda reduces tus emisiones de CO2 a la atmósfera de forma notable.

 

¿Cuál es el mejor aislamiento térmico?

Como todo en esta vida, depende.

Depende de dónde vivas. No necesitas el mismo aislamiento en Benidorm que en Vigo, por razones obvias. La temperatura media y el nivel de humedad serán parámetros a tener en cuenta. No solo por el grosor requerido, sino para evitar la proliferación de hongos y bacterias por causa de la humedad, y que puede provocar que los materiales se degraden antes de lo previsto.

Depende del espacio que necesites aislar. Si vas a aislar la fachada, no hay problema. Pero si lo vas a hacer en el interior, ten en cuenta que algunos sistemas, como el pladur, requieren de 4 a 6 centímetros para su instalación. Si tienes un espacio reducido, quizá esos centímetros sean vitales para ti.

Depende de lo ruidosa que sea tu área. El aislamiento térmico también puede incorporar aislamiento acústico. Si vives en el centro de una ciudad o un lugar con mucho tráfico, debes tener en cuenta esta opción.

 

Por último, ten en cuenta el coste de la instalación, en nivel de aislamiento y si necesita mantenimiento. Toma tu tiempo, baraja tus opciones y escoge el aislamiento que más se ajuste a tus necesidades.

Instala también unas ventanas de PVC con doble cristal y seguro que lo notas en la próxima factura.